Carrera popular

Hoy se han celebrado en Leganés, la ciudad al Sur de Madrid donde vivimos, la Carrera Popular y el Día Paralímpico. Se trata de una carrera por el barrio que termina en el polideportivo, donde después hay un montón de exhibiciones de diferentes disciplinas que practican los clubes deportivos de la ciudad.

Nunca habíamos participado en la carrera. De hecho, cualquiera que me conozca estará alucinado, porque no soy nada deportista. Peeeeeeero, este año el Pirata quería participar, y ¿cómo lo consiguió? Diciéndoselo a su abuelo. Cuando los demás nos hemos enterado, ¡ya estábamos todos inscritos y los dorsales en casa!

Así que allí estábamos esta mañana  a las diez, para tomar la salida.

La inmensa mayoría de los participantes, si no todos, éramos familias del barrio, desde los niños pequeños hasta los abuelos, y era un ambiente muy divertido. ¡Hasta la Princesa y el Pirata han corrido lo suyo!

Yo me lo he tomado más en plan paseo dominical (que vivimos en un barrio muy agradable, oiga, lleno de zonas verdes preciosas), la segunda mitad del recorrido con la Princesa a hombros porque, pobre mía, ha dicho que ya no podía más. Pero al final hemos llegado a la meta los seis (la Princesa, el Pirata, Ella, los abuelos y yo).

Después, los peques se lo han pasado pipa en el polideportivo haciendo esgrima, tiro con arco, baloncesto en silla de ruedas, y un montón de cosas más.

Lo cierto es que hemos pasado una mañana muy divertida en familia. Creo que hoy ha empezado una nueva tradición familiar.

Y, tejerilmente, ¿cuánto ha dado de sí la semana? Pues algo ha habido. No he terminado ningún proyecto, pero sigo trabajando en mi Echo Beach Shawl, y además he empezado dos piezas nuevas.

Por un lado, pensando ya en el veranito que tenemos a la vuelta de la esquina, he montado los puntos para tejer un Banana Leaf Shawl, patrón de Yuki Ueda, en Drops Lace. Un hilo muy delgado, con un montón de metros en muy poco espacio (una sola madeja), y un patrón que, a pesar de ser vistoso, a priori no parece muy complicado. Ideal para viajar y que no sea un estorbo en el equipaje.

Por otro lado, ya pensando en el Christmas Knitting y siguiendo con la fiebre que me ha dado últimamente por el telar de mano, he diseñado un pequeño neceser de señora, para llevar los cosméticos (o lo que sea) dentro del bolso. Ya tengo tejido y montado uno de muestra, en Drops Baby Alpaca Silk a doble hebra, combinando gris y rosa.

Queda forrarlo y ponerle la cremallera; si queda bien, la idea es hacer unos cuantos para regalar a las señoras de la familia estas Navidades.

Y si no, pues alguna otra cosa nos inventaremos…